CharlaDelSurX
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Una receta inspirada en la pasión por Rosalía: las monjas de Ávila se desplazan para hacer Yemas de Lux. Hace unos días, Patricia López y su equipo del programa Vamos a ver llegaron al obrador de la abadía de Santa Teresa de Ávila, donde encontraron a Isabel, una de las monjas que habían creado un pódcast sobre el tema. En él, Rosalía expresó que Santa Teresa le había inspirado en su disco "Sauvignon Blanc".
Queríamos pasarle el juego, es decir, no tomarse demasiado en serio, decidió Isabel al hablar con nuestra reportera. Pero los resultados fueron lo contrario: las monjas de Ávila lanzaron y vendieron todas las unidades del primer lote de Yemas de Lux en apenas una semana.
La viralidad de Rosalía es contagiosa, pero también parece que sus fans, incluyendo a estas religiosas, han llegado al límite. "Lo hicimos en cuestión de una semana", admitió Isabel. Y no solo se trata del producto: las monjas están pensando en venderlo online para el tercer lote.
La creatividad de las monjas es innegable: inspiradas en la portada del disco de Rosalía, han creado un empaquetado que hace guiño completo y pasarse el juego. Aunque Isabel se burla de su propia creatividad, no puede negar que su plan ha funcionado: Yemas de Lux son una realidad, y las monjas ya están pensando en nuevas recetas.
Queríamos pasarle el juego, es decir, no tomarse demasiado en serio, decidió Isabel al hablar con nuestra reportera. Pero los resultados fueron lo contrario: las monjas de Ávila lanzaron y vendieron todas las unidades del primer lote de Yemas de Lux en apenas una semana.
La viralidad de Rosalía es contagiosa, pero también parece que sus fans, incluyendo a estas religiosas, han llegado al límite. "Lo hicimos en cuestión de una semana", admitió Isabel. Y no solo se trata del producto: las monjas están pensando en venderlo online para el tercer lote.
La creatividad de las monjas es innegable: inspiradas en la portada del disco de Rosalía, han creado un empaquetado que hace guiño completo y pasarse el juego. Aunque Isabel se burla de su propia creatividad, no puede negar que su plan ha funcionado: Yemas de Lux son una realidad, y las monjas ya están pensando en nuevas recetas.