CharlaDelPuebloX
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Las Vegas 2, el templo del rock burgalés que hizo llorar a Melgar. La historia es una mezcla de documental y ficción, pero lo cierto es que en un pueblo de apenas mil quinientos habitantes se convirtió en capital de la música gracias a la discoteca y sala de conciertos que abrió Paco Vega en 1970.
El fundador de Las Vegas 2, quien falleció recientemente, relata jugosas batallitas del mundo de la música, como cuando el manager de Romina Power y Al Bano quiso estafarlo. “El pájaro me quería tangar 500.000 pesetas”, cuenta Vega. Un sargento de la Guardia Civil le puso la pistola en la frente al farsante para que se dejara de historias.
La obra se centra en los Ramones, a cuyo último integrante vivo, Marky Ramone, se busca en Nueva York para ver si recuerda ese santuario burgalés. El director del filme, Javier Castro, se ha coordinado con el periodista musical Jorge Bobadilla para realizar el documental.
La producción abunda en la gloriosa mezcla vivida en Melgar en los años 80 y 90: se combinan paisanos en mono de trabajo con los mitos del rock; lo mismo habla un labrador que descargaba gallinas para pagarse un concierto. Castro ríe cuando le preguntan por los aforos, miles de personas abarrotando el garito.
Jorge Martínez, de Ilegales, evoca el buen rollo de la zona, donde después de los conciertos se iban todos de copas por los bares. Pilar Vega, hermana y socia del padrino del rock burgalés, resume ese pluriempleo que tanto dinero trajo a Melgar.
El frenesí sobre Las Vegas 2, y los vientos de la época, llevaron a Melgar de Fernamental dos desafíos que acabaron tumbando el emporio: accidentes de tráfico provocados por conductores que había consumido drogas o alcohol. La Guardia Civil comenzó a poner controles, los clientes se redujeron y llegó un momento en que los Vega tuvieron que clausurar un negocio que habían hecho crecer empapelando con carteles.
La historia de Las Vegas 2 es una mezcla de éxtasis y tragedia. Un lugar donde el rock y la música tecno se convirtieron en una parte integral del paisaje, pero también donde la vida nocturna fue acompañada por accidentes y tragedias. El legado de Paco Vega y de Las Vegas 2 sigue vivo, un recuerdo de una época que nunca olvidaremos.
El fundador de Las Vegas 2, quien falleció recientemente, relata jugosas batallitas del mundo de la música, como cuando el manager de Romina Power y Al Bano quiso estafarlo. “El pájaro me quería tangar 500.000 pesetas”, cuenta Vega. Un sargento de la Guardia Civil le puso la pistola en la frente al farsante para que se dejara de historias.
La obra se centra en los Ramones, a cuyo último integrante vivo, Marky Ramone, se busca en Nueva York para ver si recuerda ese santuario burgalés. El director del filme, Javier Castro, se ha coordinado con el periodista musical Jorge Bobadilla para realizar el documental.
La producción abunda en la gloriosa mezcla vivida en Melgar en los años 80 y 90: se combinan paisanos en mono de trabajo con los mitos del rock; lo mismo habla un labrador que descargaba gallinas para pagarse un concierto. Castro ríe cuando le preguntan por los aforos, miles de personas abarrotando el garito.
Jorge Martínez, de Ilegales, evoca el buen rollo de la zona, donde después de los conciertos se iban todos de copas por los bares. Pilar Vega, hermana y socia del padrino del rock burgalés, resume ese pluriempleo que tanto dinero trajo a Melgar.
El frenesí sobre Las Vegas 2, y los vientos de la época, llevaron a Melgar de Fernamental dos desafíos que acabaron tumbando el emporio: accidentes de tráfico provocados por conductores que había consumido drogas o alcohol. La Guardia Civil comenzó a poner controles, los clientes se redujeron y llegó un momento en que los Vega tuvieron que clausurar un negocio que habían hecho crecer empapelando con carteles.
La historia de Las Vegas 2 es una mezcla de éxtasis y tragedia. Un lugar donde el rock y la música tecno se convirtieron en una parte integral del paisaje, pero también donde la vida nocturna fue acompañada por accidentes y tragedias. El legado de Paco Vega y de Las Vegas 2 sigue vivo, un recuerdo de una época que nunca olvidaremos.