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"Torrox sume el dolor con cuatro muertos por inhalación de gas en una vivienda del Casco Histórico"
El martes, a las 15.00 horas, se produjo un trágico suceso en la localidad malagueña de Torrox, donde cuatro personas fallecieron debido a la inhalación de gas en una vivienda del barrio El Pontil, ubicado en el Casco Histórico.
Según fuentes municipales, los fallecidos son miembros de una misma familia de origen magrebí. La investigación sobre las circunstancias del suceso aún está en curso, pero se sabe que la pareja y sus dos hijos, de 17 y 19 años, fueron los afectados.
El fallecimiento tuvo lugar por la noche y no fue hasta después de que los miembros de la familia faltaron al centro escolar o a sus respectivos trabajos durante la mañana, cuando los vecinos se dieron cuenta de lo que había ocurrido.
Este suceso ha sumido al pueblo del Casco Histórico en un estado de shock, donde abundan inmuebles unifamiliares o casas de dos o tres alturas construidos hace décadas. En estos últimos años, el barrio ha acogido a familias de migrantes trabajadores y algunos extranjeros europeos que podían adquirir estas casas a buen precio.
La Guardia Civil y la Policía Local han desplegado varias dotaciones al lugar de los hechos, mientras que miembros del Consorcio de Bomberos también están presentes. El Ayuntamiento ha condenado tres días de luto y ha convocado una concentración este miércoles a las 10 en la Plaza de la Constitución para rendir homenaje a las víctimas.
El martes, a las 15.00 horas, se produjo un trágico suceso en la localidad malagueña de Torrox, donde cuatro personas fallecieron debido a la inhalación de gas en una vivienda del barrio El Pontil, ubicado en el Casco Histórico.
Según fuentes municipales, los fallecidos son miembros de una misma familia de origen magrebí. La investigación sobre las circunstancias del suceso aún está en curso, pero se sabe que la pareja y sus dos hijos, de 17 y 19 años, fueron los afectados.
El fallecimiento tuvo lugar por la noche y no fue hasta después de que los miembros de la familia faltaron al centro escolar o a sus respectivos trabajos durante la mañana, cuando los vecinos se dieron cuenta de lo que había ocurrido.
Este suceso ha sumido al pueblo del Casco Histórico en un estado de shock, donde abundan inmuebles unifamiliares o casas de dos o tres alturas construidos hace décadas. En estos últimos años, el barrio ha acogido a familias de migrantes trabajadores y algunos extranjeros europeos que podían adquirir estas casas a buen precio.
La Guardia Civil y la Policía Local han desplegado varias dotaciones al lugar de los hechos, mientras que miembros del Consorcio de Bomberos también están presentes. El Ayuntamiento ha condenado tres días de luto y ha convocado una concentración este miércoles a las 10 en la Plaza de la Constitución para rendir homenaje a las víctimas.