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Ucrania al borde: dignidad versus aliado clave
El presidente Volodímir Zelenski ha dejado claro que su país puede enfrentarse a una situación irreducible: perder la dignidad nacional o renunciar a un aliado clave en el conflicto con Rusia. Este es el mensaje que ha transmitido en un discurso a la nación, tras la presentación de un plan de 28 puntos por parte de EEUU para poniendo fin a la guerra.
El presidente ucraniano ha considerado inaceptable este plan, que plantea retirar las tropas ucranianas del territorio controlado en el Donbás, limitar su ejército y renunciar al despliegue de tropas de la OTAN. Zelenski ha asegurado que trabajará sin descanso para avanzar hacia la paz, pero bajo ninguna circunstancia permitirá que Ucrania parezca no estar dispuesta a buscar una solución.
El plan de EEUU es un punto de inflexión en la crisis, ya que podría significar la derrota militar ucraniana y el reconocimiento soviético del territorio ruso. Sin embargo, Zelenski ha rechazado cualquier acuerdo que comprometa la soberanía y la dignidad de su país.
La crisis interna en Ucrania es cada vez más apurienta, con la supuesta trama presuntamente liderada por un exsocio empresarial del presidente y varios ministros implicados. Además, las fuerzas rusas han avanzado en el frente de Zaporiyia, amenazando con consumar la toma de varias ciudades.
El gobierno ucraniano se enfrenta a una elección difícil: entre mantener su dignidad nacional y renunciar a un aliado clave. La situación es delicada y cada día parece que Ucrania está más lejos del camino hacia la paz.
El presidente Volodímir Zelenski ha dejado claro que su país puede enfrentarse a una situación irreducible: perder la dignidad nacional o renunciar a un aliado clave en el conflicto con Rusia. Este es el mensaje que ha transmitido en un discurso a la nación, tras la presentación de un plan de 28 puntos por parte de EEUU para poniendo fin a la guerra.
El presidente ucraniano ha considerado inaceptable este plan, que plantea retirar las tropas ucranianas del territorio controlado en el Donbás, limitar su ejército y renunciar al despliegue de tropas de la OTAN. Zelenski ha asegurado que trabajará sin descanso para avanzar hacia la paz, pero bajo ninguna circunstancia permitirá que Ucrania parezca no estar dispuesta a buscar una solución.
El plan de EEUU es un punto de inflexión en la crisis, ya que podría significar la derrota militar ucraniana y el reconocimiento soviético del territorio ruso. Sin embargo, Zelenski ha rechazado cualquier acuerdo que comprometa la soberanía y la dignidad de su país.
La crisis interna en Ucrania es cada vez más apurienta, con la supuesta trama presuntamente liderada por un exsocio empresarial del presidente y varios ministros implicados. Además, las fuerzas rusas han avanzado en el frente de Zaporiyia, amenazando con consumar la toma de varias ciudades.
El gobierno ucraniano se enfrenta a una elección difícil: entre mantener su dignidad nacional y renunciar a un aliado clave. La situación es delicada y cada día parece que Ucrania está más lejos del camino hacia la paz.