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El Barça de Flick, el equipo que se suponía estaba listo para enfrentar al clásico frente a su rival madridista. Pero el alemán no se ha encontrado con la misma efervescencia y energía que su equipo, y esa es la realidad que le enfrenta. Dos meses de competición sin una estructura armónica, atrevida hasta la inconsciencia, sólida y firme que antes había mostrado en el campo.
El conjunto deshilachado, inconsistente, frágil y sin puntería que sigue en las alturas de la Liga también emite síntomas inacabables de debilidad. La falta de frescura física es evidente, especialmente después de una temporada marcada por lesiones que han debilitado tanto al cuerpo como a la mente del equipo.
El entrenador, Hansi Flick, se ha mostrado vulnerable en momentos clave y el resultado no ha sido bueno. Dos veces expulsado en los últimos partidos, lo que nos deja pensando ¿cómo se va a recuperar esta situación? Y, lo peor, el Barça va perdiendo terreno frente al Real Madrid.
La carga de esfuerzos para Flick es enorme. Su equipo está desmantelándose por falta de frescura y motivación. Las bajas no han ayudado, sino que han empeorado la situación. El entrenador se ha visto obligado a realizar movimientos en el banquillo que nunca antes había tenido que hacer.
Pedri, un jugador clave del equipo, no está ocultando su frustración ante la situación actual. "Cuando presionas mal y tienes la línea tan arriba es muy fácil para el contrario crearte ocasiones", advierte. Y en los últimos partidos, ese contraste ha sido evidente.
En los tres últimos partidos del equipo, han marcado solo cuatro goles. Es un número decepcionante que no permite al equipo ser peligroso ante sus rivales. Flick se ve obligado a encontrar la respuesta adecuada para mantener su equipo en el juego.
El Barça va a tener que trabajar duro para recuperarse de esta situación y evitar que la situación empeore. Y, lo peor, ya no tiene el tiempo que le hubiera gustado. El clásico contra el Madrid se acerca y el equipo debe estar listo para enfrentar el desafío.
El conjunto deshilachado, inconsistente, frágil y sin puntería que sigue en las alturas de la Liga también emite síntomas inacabables de debilidad. La falta de frescura física es evidente, especialmente después de una temporada marcada por lesiones que han debilitado tanto al cuerpo como a la mente del equipo.
El entrenador, Hansi Flick, se ha mostrado vulnerable en momentos clave y el resultado no ha sido bueno. Dos veces expulsado en los últimos partidos, lo que nos deja pensando ¿cómo se va a recuperar esta situación? Y, lo peor, el Barça va perdiendo terreno frente al Real Madrid.
La carga de esfuerzos para Flick es enorme. Su equipo está desmantelándose por falta de frescura y motivación. Las bajas no han ayudado, sino que han empeorado la situación. El entrenador se ha visto obligado a realizar movimientos en el banquillo que nunca antes había tenido que hacer.
Pedri, un jugador clave del equipo, no está ocultando su frustración ante la situación actual. "Cuando presionas mal y tienes la línea tan arriba es muy fácil para el contrario crearte ocasiones", advierte. Y en los últimos partidos, ese contraste ha sido evidente.
En los tres últimos partidos del equipo, han marcado solo cuatro goles. Es un número decepcionante que no permite al equipo ser peligroso ante sus rivales. Flick se ve obligado a encontrar la respuesta adecuada para mantener su equipo en el juego.
El Barça va a tener que trabajar duro para recuperarse de esta situación y evitar que la situación empeore. Y, lo peor, ya no tiene el tiempo que le hubiera gustado. El clásico contra el Madrid se acerca y el equipo debe estar listo para enfrentar el desafío.