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En las carnicerías, un cartel mal interpretado puede significar un error financiero. Mariano Sánchez, conocido como "el as carnicero" debido a sus consejos prácticos para los consumidores, ha advertido sobre los carteles que se encuentran en el mostrador de la ternera. Estos carteles pueden ser confusos y llevar a compradores erróneos a comprar cortes de diferentes categorías al mismo precio.
En particular, Sánchez destaca los carteles "1ª A" y "1ª B", que pueden referirse a cortes de ternera de diferentes características. Los filetes con cartel "1ª A" son más magros y provienen del extremo trasero del animal, como la tapa, la tapilla o la cadera. Por otro lado, los cortes con cartel "1ª B" tienen más grasa y se extraen del brazo de la ternera.
Sin embargo, Sánchez aclara que no todos los cortes que se consideran 1ª B son iguales. Algunas piezas, como el rabillo de la cadera o la culata de la contra, pueden ser clasificadas como 1ª B, pero no necesariamente lo son. Lo importante es saber qué se está comprando para evitar la confusión.
Además, Sánchez ha compartido su experiencia sobre la importancia de pesar la carne picada en la carnicería antes de comprarla. Algunos consumidores se han dado cuenta de que han marcado la carne y luego se la han vuelto a pesar, perdiendo gramos en el proceso.
En resumen, Mariano Sánchez advierte a los consumidores para ser cuidadosos al interpretar los carteles en el mostrador de la ternera y para saber qué se está comprando antes de tomar una decisión.
En particular, Sánchez destaca los carteles "1ª A" y "1ª B", que pueden referirse a cortes de ternera de diferentes características. Los filetes con cartel "1ª A" son más magros y provienen del extremo trasero del animal, como la tapa, la tapilla o la cadera. Por otro lado, los cortes con cartel "1ª B" tienen más grasa y se extraen del brazo de la ternera.
Sin embargo, Sánchez aclara que no todos los cortes que se consideran 1ª B son iguales. Algunas piezas, como el rabillo de la cadera o la culata de la contra, pueden ser clasificadas como 1ª B, pero no necesariamente lo son. Lo importante es saber qué se está comprando para evitar la confusión.
Además, Sánchez ha compartido su experiencia sobre la importancia de pesar la carne picada en la carnicería antes de comprarla. Algunos consumidores se han dado cuenta de que han marcado la carne y luego se la han vuelto a pesar, perdiendo gramos en el proceso.
En resumen, Mariano Sánchez advierte a los consumidores para ser cuidadosos al interpretar los carteles en el mostrador de la ternera y para saber qué se está comprando antes de tomar una decisión.