Jesús Sánchez, un creador de contenido andaluz, nos muestra la verdad detrás de su experiencia de vida en Ámsterdam. En una casa compartida con cuatro personas, el joven gaditano nos lleva por su estudio para explicar sus particularidades.
El primer aspecto que llama la atención es el salón-cama, pequeño pero funcional. "Aquí es donde me siento entretenido", dice Jesús mientras se sienta en el sofá-cama y abre una de sus novelas turcas. En este espacio también tiene su escritorio con dos monitores para trabajar desde casa.
La cocina resulta sorprendente gracias a la ubicación de la ducha, que "es eficiencia holandesa" según sus palabras. Sin embargo, en este apartamento, no hay baño en el estudio, lo que significa que cada vez que necesita usar el inodoro o afeitarse, tiene que recurrir al pasillo del apartamento y compartirlo con una vecina italiana.
Jesús también nos cuenta que paga 845 euros al mes, incluyendo gastos, lo cual considera "la mejor oferta" en este momento. Sin embargo, también nos advierte sobre la necesidad de paciencia y suerte para encontrar un alojamiento decente en Ámsterdam.
El joven gaditano decidió regresar a España después de varios meses en Holanda. Ahora, nos muestra su pisito madrileño para que podamos conocer su nuevo hogar.
El primer aspecto que llama la atención es el salón-cama, pequeño pero funcional. "Aquí es donde me siento entretenido", dice Jesús mientras se sienta en el sofá-cama y abre una de sus novelas turcas. En este espacio también tiene su escritorio con dos monitores para trabajar desde casa.
La cocina resulta sorprendente gracias a la ubicación de la ducha, que "es eficiencia holandesa" según sus palabras. Sin embargo, en este apartamento, no hay baño en el estudio, lo que significa que cada vez que necesita usar el inodoro o afeitarse, tiene que recurrir al pasillo del apartamento y compartirlo con una vecina italiana.
Jesús también nos cuenta que paga 845 euros al mes, incluyendo gastos, lo cual considera "la mejor oferta" en este momento. Sin embargo, también nos advierte sobre la necesidad de paciencia y suerte para encontrar un alojamiento decente en Ámsterdam.
El joven gaditano decidió regresar a España después de varios meses en Holanda. Ahora, nos muestra su pisito madrileño para que podamos conocer su nuevo hogar.
Me parece interesante cómo Jesús se adapta a la vida en Ámsterdam. A mí me resulta un poco extraño compartir el baño con una vecina, pero creo que es parte de la cultura holandesa. La eficiencia es clave allí 
. Me encanta su estudio, aunque es pequeño, parece muy funcional y cómodo. Y 845 euros al mes es un buen precio para un alojamiento en una ciudad tan carísima como Ámsterdam. Me alegra que haya decidido regresar a España, aunque sé que puede ser difícil encontrar un lugar decente allí también 
.
, ¿no? Pero en serio, la forma en que ha configurado su salón-cama me hace sentir un poco de lástima, siempre tienes que compartir un baño con alguien más. Y eso es algo que debería considerar antes de decidirse por una casa compartida.
. Me parece que la eficiencia holandesa que mencionó Jesús es algo que todos deberíamos intentar en nuestras vidas. Y 845 euros al mes, ¿eso no es una cantidad muy razonable? Pero sí, me parece que tiene razón cuando dice que hay que tener paciencia y suerte para encontrar un alojamiento decente en Ámsterdam.
. Pero en serio, la eficiencia holandesa es impresionante, me hace pensar que hay mucho que podemos aprender de aquellos neerlandeses en materia de diseño y ahorro de espacio. Me parece que Jesús tiene mucha suerte al tener un piso con dos monitores, eso es algo que yo nunca he visto 
.
Pero en serio, ¿cómo se puede viver así?
He estado pensando si la verdad es que Ámsterdam es el lugar perfecto para vivir solo con cuatro personas en una casa pequeña. Me parece un poco loco, ¿no? 
️ Pero, al fin y al cabo, Jesús me ha enseñado a apreciar las cosas pequeñas en una habitación compartida. ¡Me inspira! 
