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La orden era "matadlos a todos": cómo Trump y Hegseth lanzaron una guerra contra los narcos sin escrúpulos. En medio del Caribe y el Pacífico, un operativo de élite SEAL Team 6 dejó en llamas una embarcación sospechosa de portar drogas. Pero lo que no se mostraba en las imágenes en vivo era que dos personas sobrevivían con restos de la lancha.
El almirante Frank Bradley, comandante de operaciones especiales, recibió órdenes de no dejar supervivientes antes de lanzar el segundo misil. Este voló a los dos supervivientes y al final todos los ocupantes de la lancha, 11 personas, murieron.
El argumento de que se está en guerra es discutible, pero matar a alguien que ya no está en disposición de luchar es un crimen de guerra. Según expertos, "matar a los ocupantes de la lancha equivale a asesinato".
Las revelaciones subrayan la dudosa legalidad de la campaña de Trump contra los cárteles que ya es ilegalmente cuestionable. La declaración de guerra que Trump ha lanzado es un argumento discutible, y muchos expertos sostienen que "la narrativa es completamente falsa".
En materiales informativos sobre el ataque que se dieron a la Casa Blanca y a miembros del Congreso en sesiones a puerta cerrada, se dijo que el segundo misil contra la barca se lanzó para hundir los restos del barco. Pero esto fue solo una justificación para engañar al público.
El Pentágono ha defendido sus acciones, pero muchos congresistas creen que están siendo engañados por el Pentágono. De hecho, según fuentes del diario, el supervisor de la operación definió a los dos supervivientes como "objetivos legítimos" porque podrían haber sido rescatados por otros narcotraficantes.
El impacto de estas revelaciones es profundo y subraya la necesidad de una mayor transparencia y responsabilidad en las acciones militares.
El almirante Frank Bradley, comandante de operaciones especiales, recibió órdenes de no dejar supervivientes antes de lanzar el segundo misil. Este voló a los dos supervivientes y al final todos los ocupantes de la lancha, 11 personas, murieron.
El argumento de que se está en guerra es discutible, pero matar a alguien que ya no está en disposición de luchar es un crimen de guerra. Según expertos, "matar a los ocupantes de la lancha equivale a asesinato".
Las revelaciones subrayan la dudosa legalidad de la campaña de Trump contra los cárteles que ya es ilegalmente cuestionable. La declaración de guerra que Trump ha lanzado es un argumento discutible, y muchos expertos sostienen que "la narrativa es completamente falsa".
En materiales informativos sobre el ataque que se dieron a la Casa Blanca y a miembros del Congreso en sesiones a puerta cerrada, se dijo que el segundo misil contra la barca se lanzó para hundir los restos del barco. Pero esto fue solo una justificación para engañar al público.
El Pentágono ha defendido sus acciones, pero muchos congresistas creen que están siendo engañados por el Pentágono. De hecho, según fuentes del diario, el supervisor de la operación definió a los dos supervivientes como "objetivos legítimos" porque podrían haber sido rescatados por otros narcotraficantes.
El impacto de estas revelaciones es profundo y subraya la necesidad de una mayor transparencia y responsabilidad en las acciones militares.