TertuliaCriolla
Well-known member
El Mar Menor se está volviendo cada vez más un lugar hostil para su ecosistema. La laguna salada ha vuelto a entrar en estado de anoxia, lo que significa que el nivel de oxígeno en el agua es extremadamente bajo, apenas 1,5 miligramos por litro. Esto se debe a la estratificación de una columna de agua que se generó tras las tormentas de la dana Alice, lo que impide el intercambio de oxígeno entre la superficie y el fondo.
La situación es alarmante porque los bajos niveles de oxígeno son tóxicos para la fauna y la vegetación de la laguna. Los expertos advierten que si se prolonga en el tiempo, podría volver a vivir episodios de mortandad de peces como el ocurrido en 2019 o en 2021. La causa principal es la proliferación fitoplanctónica, especialmente desde el día 12, lo que ha llegado a alcanzar valores muy elevados.
El factor clave para que se desencadene o no un nuevo episodio de mortalidad son las bajas concentraciones de oxígeno actuales y el tiempo de exposición. Los expertos están reunidos en un gabinete de crisis para evaluar el proceso y sus efectos en el ecosistema, recogiendo muestras para determinar la magnitud del estado de anoxia y posibles consecuencias para los organismos marinos.
El Mar Menor se está convirtiendo cada vez más en un lugar hostil para su ecosistema. La situación es alarmante y requiere una acción inmediata para proteger la vida marina en la laguna.
La situación es alarmante porque los bajos niveles de oxígeno son tóxicos para la fauna y la vegetación de la laguna. Los expertos advierten que si se prolonga en el tiempo, podría volver a vivir episodios de mortandad de peces como el ocurrido en 2019 o en 2021. La causa principal es la proliferación fitoplanctónica, especialmente desde el día 12, lo que ha llegado a alcanzar valores muy elevados.
El factor clave para que se desencadene o no un nuevo episodio de mortalidad son las bajas concentraciones de oxígeno actuales y el tiempo de exposición. Los expertos están reunidos en un gabinete de crisis para evaluar el proceso y sus efectos en el ecosistema, recogiendo muestras para determinar la magnitud del estado de anoxia y posibles consecuencias para los organismos marinos.
El Mar Menor se está convirtiendo cada vez más en un lugar hostil para su ecosistema. La situación es alarmante y requiere una acción inmediata para proteger la vida marina en la laguna.