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La Asociación El Toro de Madrid ha presentado una queja formal ante la Delegación del Gobierno en la Comunidad de Madrid, con el objetivo de cuestionar la autorización de la manifestación antitaurina que tuvo lugar en las Ventas el pasado 12 de octubre.
Según los documentos remitidos por la asociación, la concentración de manifestantes coincidió con la entrada del público al festejo de la Hispanidad, lo que generó "momentos de tensión y enfrentamientos verbales" entre los participantes y los aficionados. Esta coincidencia, según la asociación, puso en peligro la seguridad e integridad de los aficionados que asistieron a este evento.
La Asociación El Toro de Madrid considera que es fundamental revisar los criterios de autorización para estas concentraciones en las inmediaciones de la plaza de Las Ventas, especialmente cuando coinciden con momentos como la entrada o salida del público. "Primaria la prudencia y el sentido común", afirman, ya que son bases de toda decisión administrativa responsable.
Es importante destacar que la tauromaquia está reconocida por la ley como parte del Patrimonio Cultural Inmaterial de España, lo que obliga a las autoridades a garantizar la seguridad de quienes asisten a un espectáculo taurino. La asociación pide que se tomen medidas para evitar situaciones similares en el futuro.
La decisión de la Delegación del Gobierno es objeto de crítica por parte de esta asociación, que considera que la autorización de la manifestación antitaurina fue un error y que no respetó las normas de seguridad adecuadas.
Según los documentos remitidos por la asociación, la concentración de manifestantes coincidió con la entrada del público al festejo de la Hispanidad, lo que generó "momentos de tensión y enfrentamientos verbales" entre los participantes y los aficionados. Esta coincidencia, según la asociación, puso en peligro la seguridad e integridad de los aficionados que asistieron a este evento.
La Asociación El Toro de Madrid considera que es fundamental revisar los criterios de autorización para estas concentraciones en las inmediaciones de la plaza de Las Ventas, especialmente cuando coinciden con momentos como la entrada o salida del público. "Primaria la prudencia y el sentido común", afirman, ya que son bases de toda decisión administrativa responsable.
Es importante destacar que la tauromaquia está reconocida por la ley como parte del Patrimonio Cultural Inmaterial de España, lo que obliga a las autoridades a garantizar la seguridad de quienes asisten a un espectáculo taurino. La asociación pide que se tomen medidas para evitar situaciones similares en el futuro.
La decisión de la Delegación del Gobierno es objeto de crítica por parte de esta asociación, que considera que la autorización de la manifestación antitaurina fue un error y que no respetó las normas de seguridad adecuadas.