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El guionista Juan del Val, ganador del Premio Planeta con su novela "Vera. Una historia de amor", ha hablado abiertamente sobre sus experiencias y creencias, destacando la importancia de la conexión con el público y la literatura como un vehículo de comunicación accesible.
Para Del Val, la crítica a los políticos no es algo que deba ser evitado, sino que es fundamental para mantener una sociedad justa y libre. "Paso de ser un rojo peligroso a un facha tremendo de un sitio a otro", dijo en su discurso del Planeta, refiriéndose a la tendencia a etiquetar a los escritores y creadores como si fueran extremistas o ideológicamente ligados a un partido o ideología en particular.
Del Val ha hablado claramente sobre sus experiencias personales con el poder político, destacando que aunque se siente cómodo criticando al gobierno del momento, también está dispuesto a ser crítico con cualquier otro que abuse de su poder. "Me da exactamente igual", dijo, reflejando una postura política y social clara.
En cuanto a su escritura, Del Val enfatizó la importancia de dejar que el lector interprete libremente, evitando estereotipos simplistas y críticas desmedidas. "No me creo ni los elogios desmedidos ni las demonias y las críticas despiadadas", dijo, destacando su enfoque en la calidad literaria y la conexión con el público.
La colaboración de su esposa Nuria Roca, también escritora, influyó positivamente en su trayectoria como autor. Juntos escribieron dos libros, pero luego se separaron por incompatibilidades creativas. La primera novela de Del Val en solitario, "Parece mentira", marcó un antes y un después en su carrera.
En el ámbito del Premio Planeta, Del Val reivindicó la literatura como un evento popular, accesible a todos. "El Premio Planeta se sustenta en dos pilares: lo comercial y la calidad literaria", dijo, destacando que la literatura debe ser un vehículo de comunicación artística para llegar al mayor número de receptores posibles.
Del Val ha recibido críticas intensas por su postura política y social, pero sigue siendo crítico con el poder político y está dispuesto a hablar sobre las injusticias y abusos que percibe. Su enfoque en la conexión con el público y la literatura como un vehículo de comunicación accesible ha sido una fuerza impulsora en su carrera como escritor.
Para Del Val, la crítica a los políticos no es algo que deba ser evitado, sino que es fundamental para mantener una sociedad justa y libre. "Paso de ser un rojo peligroso a un facha tremendo de un sitio a otro", dijo en su discurso del Planeta, refiriéndose a la tendencia a etiquetar a los escritores y creadores como si fueran extremistas o ideológicamente ligados a un partido o ideología en particular.
Del Val ha hablado claramente sobre sus experiencias personales con el poder político, destacando que aunque se siente cómodo criticando al gobierno del momento, también está dispuesto a ser crítico con cualquier otro que abuse de su poder. "Me da exactamente igual", dijo, reflejando una postura política y social clara.
En cuanto a su escritura, Del Val enfatizó la importancia de dejar que el lector interprete libremente, evitando estereotipos simplistas y críticas desmedidas. "No me creo ni los elogios desmedidos ni las demonias y las críticas despiadadas", dijo, destacando su enfoque en la calidad literaria y la conexión con el público.
La colaboración de su esposa Nuria Roca, también escritora, influyó positivamente en su trayectoria como autor. Juntos escribieron dos libros, pero luego se separaron por incompatibilidades creativas. La primera novela de Del Val en solitario, "Parece mentira", marcó un antes y un después en su carrera.
En el ámbito del Premio Planeta, Del Val reivindicó la literatura como un evento popular, accesible a todos. "El Premio Planeta se sustenta en dos pilares: lo comercial y la calidad literaria", dijo, destacando que la literatura debe ser un vehículo de comunicación artística para llegar al mayor número de receptores posibles.
Del Val ha recibido críticas intensas por su postura política y social, pero sigue siendo crítico con el poder político y está dispuesto a hablar sobre las injusticias y abusos que percibe. Su enfoque en la conexión con el público y la literatura como un vehículo de comunicación accesible ha sido una fuerza impulsora en su carrera como escritor.