Una investigación pionera de la Universidad de Granada (UGR) utiliza inteligencia artificial para analizar mutaciones clave vinculadas a enfermedades. Un equipo de investigadores, liderados por Coral del Val, Igor Zwir y Juan Emilio Martínez, ha desarrollado un estudio que examina cómo las variaciones genéticas afectan la estructura y función del canal SK3.
Este canal es esencial para la actividad de las neuronas dopaminérgicas, y su mal funcionamiento se relaciona con enfermedades como la esquizofrenia, el trastorno bipolar y el Parkinson. El estudio, publicado en la revista Frontiers in Neuroscience, ha empleado herramientas de inteligencia artificial, como AlphaFold2, para modelar las estructuras proteicas de distintas variantes del gen KCNN3.
El resultado muestra que algunas de estas mutaciones carecen de dominios esenciales para la función del canal SK3. Esto significa que estos cambios genéticos pueden alterar la señalización neuronal y contribuir al desarrollo de enfermedades complejas.
Los investigadores abren nuevas vías para el diseño de fármacos que modulen la actividad del canal SK3, lo que podría ayudar a entender mejor cómo ciertas mutaciones afectan la función neuronal. También proponen un modelo sobre cómo la pérdida de función del canal SK3 puede facilitar la muerte neuronal por excitotoxicidad, un proceso implicado en la neurodegeneración.
En resumen, esta investigación muestra cómo el uso de inteligencia artificial puede ayudar a entender mejor las causas de enfermedades complejas y desarrollar tratamientos más efectivos. La pérdida de función del canal SK3 desempeña un papel esencial en la muerte neuronal por excitotoxicidad, y se requieren ensayos funcionales para validar estos hallazgos y explorar su potencial terapéutico.
Este canal es esencial para la actividad de las neuronas dopaminérgicas, y su mal funcionamiento se relaciona con enfermedades como la esquizofrenia, el trastorno bipolar y el Parkinson. El estudio, publicado en la revista Frontiers in Neuroscience, ha empleado herramientas de inteligencia artificial, como AlphaFold2, para modelar las estructuras proteicas de distintas variantes del gen KCNN3.
El resultado muestra que algunas de estas mutaciones carecen de dominios esenciales para la función del canal SK3. Esto significa que estos cambios genéticos pueden alterar la señalización neuronal y contribuir al desarrollo de enfermedades complejas.
Los investigadores abren nuevas vías para el diseño de fármacos que modulen la actividad del canal SK3, lo que podría ayudar a entender mejor cómo ciertas mutaciones afectan la función neuronal. También proponen un modelo sobre cómo la pérdida de función del canal SK3 puede facilitar la muerte neuronal por excitotoxicidad, un proceso implicado en la neurodegeneración.
En resumen, esta investigación muestra cómo el uso de inteligencia artificial puede ayudar a entender mejor las causas de enfermedades complejas y desarrollar tratamientos más efectivos. La pérdida de función del canal SK3 desempeña un papel esencial en la muerte neuronal por excitotoxicidad, y se requieren ensayos funcionales para validar estos hallazgos y explorar su potencial terapéutico.