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Un joven conquense se quedó sin honor después de una falla desastrada en Ikea. El caso de José Manuel Palomares, un profesor y ex empleado del supermercado sueco, se reafirma como la peor metedura de pata de la semana.
El episodio tuvo lugar hace unos años, cuando Palomares trabajaba en el Ikea de Valencia, donde el 15 de octubre es día laboral. En ese momento, un cliente se acercó a su caja para preguntar por los arenques. A pesar del caos que había en la tienda, Palomares, agobiado por la cola, trató de resolver la situación apresuradamente. "Le dije: 'Ve el señor con el jersey verde'". Lo que él no sabía era que ese hombre era su esposa.
La verdad es que cuando el cliente volvió, acompañado de su esposa, Palomares estaba al lado y veía muy claramente a la mujer a la que le había indicado. Sin embargo, en ese momento de estrés, le parecía un hombre. Como le dijo más tarde: "No, no, él está al lado". Y así, el joven profesor se quedó sin honor tras una metedura de pata tan espantosa.
La historia es tan ridícula que incluso los presentadores del podcast La Ruina no pudieron evitar reírse. El caso de José Manuel Palomares se convirtió en una anécdota divertida, que muchos escuchantes del programa recordarán con caras de risa.
				
			El episodio tuvo lugar hace unos años, cuando Palomares trabajaba en el Ikea de Valencia, donde el 15 de octubre es día laboral. En ese momento, un cliente se acercó a su caja para preguntar por los arenques. A pesar del caos que había en la tienda, Palomares, agobiado por la cola, trató de resolver la situación apresuradamente. "Le dije: 'Ve el señor con el jersey verde'". Lo que él no sabía era que ese hombre era su esposa.
La verdad es que cuando el cliente volvió, acompañado de su esposa, Palomares estaba al lado y veía muy claramente a la mujer a la que le había indicado. Sin embargo, en ese momento de estrés, le parecía un hombre. Como le dijo más tarde: "No, no, él está al lado". Y así, el joven profesor se quedó sin honor tras una metedura de pata tan espantosa.
La historia es tan ridícula que incluso los presentadores del podcast La Ruina no pudieron evitar reírse. El caso de José Manuel Palomares se convirtió en una anécdota divertida, que muchos escuchantes del programa recordarán con caras de risa.
 
				 . Aunque es divertido, no se puede reírse demasiado cuando hay una persona que se queda sin honor debido a una metedura de pata tan espantosa. Me preocupa que Palomares haya tenido que sufrir tanto después de ese error, y me da vergüenza pensar que los clientes de Ikea ya saben quién es él y no le dan otra oportunidad
. Aunque es divertido, no se puede reírse demasiado cuando hay una persona que se queda sin honor debido a una metedura de pata tan espantosa. Me preocupa que Palomares haya tenido que sufrir tanto después de ese error, y me da vergüenza pensar que los clientes de Ikea ya saben quién es él y no le dan otra oportunidad  . Y qué frustrante que un profesional como un profesor deba tener que vivir con esto. La vida en el trabajo puede ser muy complicada, pero siempre hay que intentar aprender de nuestros errores y seguir adelante
. Y qué frustrante que un profesional como un profesor deba tener que vivir con esto. La vida en el trabajo puede ser muy complicada, pero siempre hay que intentar aprender de nuestros errores y seguir adelante  .
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 , José Manuel Palomares debería haber sido más cuidadoso en ese momento. ¡Es como si hubiera confundido a su suegra con un cliente! Me hace pensar que incluso los profesores pueden tener días malos
, José Manuel Palomares debería haber sido más cuidadoso en ese momento. ¡Es como si hubiera confundido a su suegra con un cliente! Me hace pensar que incluso los profesores pueden tener días malos  . En serio, creo que la forma en que lo contaron en el podcast La Ruina fue genial
. En serio, creo que la forma en que lo contaron en el podcast La Ruina fue genial  , siempre me gusta una buena historia para reírse
, siempre me gusta una buena historia para reírse  .
. . La cara de sorpresa cuando lo supo no se puede imaginar
. La cara de sorpresa cuando lo supo no se puede imaginar  . No me gusta cuando la prisa te lleva a equivocarte. ¿Y si tuviera esposa vestida de verde?
. No me gusta cuando la prisa te lleva a equivocarte. ¿Y si tuviera esposa vestida de verde?  . Me parece que el profesor se fue de su vida mental ese día y le dio más importancia al jersey que a lo que estaba haciendo, ¡y eso es un error grave!
. Me parece que el profesor se fue de su vida mental ese día y le dio más importancia al jersey que a lo que estaba haciendo, ¡y eso es un error grave!