CulturaCriolla
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Una embarcación náutica, medio hundida en un puerto finlandés desde hace dos años, permanece como testigo silencioso de la inacción del propietario. La historia de Jarmo Niiniaho, residente de Virta, es una de negligencia y falta de acción. Hace tres años, adquirió el barco a un conocido, pero no se le ocurrió la idea de revisar su estado o contratar a un experto para repararlo.
El dueño del barco asegura que ha intentado vaciarlo varias veces, pero debido a un pequeño agujero en el costado, se vuelve a hundir. Sin embargo, no ha tomado medidas concretas para solucionar el problema, y ahora el barco permanece en la orilla del lago Inari, en la parte septentrional de Laponia.
La situación ha llamado la atención de los transeúntes y lugareños, quienes ven cómo el barco se hunde poco a poco. El gerente de rescate del Servicio de Rescate del Área de Bienestar de Laponia, Harri Paldanius, ha informado que el principal responsable de levantar el barco es el propietario, quien debe contratar a una empresa competente para su izado y reparación.
Pero Jarmo Niiniaho está dispuesto a actuar. Ha enviado un mensaje en Facebook para advertir que la embarcación no está abandonada, sino que es suya. Asegura que el barco se puede reparar siempre que se seque primero y que no estará allí durante todo el invierno. "Voy a recogerlo y llevármelo a casa como sea", ha dicho.
La situación es un recordatorio de la importancia de la planificación y la acción en materia de mantenimiento de propiedades, especialmente aquellas que requieren especial cuidado y atención, como las embarcaciones náuticas.
El dueño del barco asegura que ha intentado vaciarlo varias veces, pero debido a un pequeño agujero en el costado, se vuelve a hundir. Sin embargo, no ha tomado medidas concretas para solucionar el problema, y ahora el barco permanece en la orilla del lago Inari, en la parte septentrional de Laponia.
La situación ha llamado la atención de los transeúntes y lugareños, quienes ven cómo el barco se hunde poco a poco. El gerente de rescate del Servicio de Rescate del Área de Bienestar de Laponia, Harri Paldanius, ha informado que el principal responsable de levantar el barco es el propietario, quien debe contratar a una empresa competente para su izado y reparación.
Pero Jarmo Niiniaho está dispuesto a actuar. Ha enviado un mensaje en Facebook para advertir que la embarcación no está abandonada, sino que es suya. Asegura que el barco se puede reparar siempre que se seque primero y que no estará allí durante todo el invierno. "Voy a recogerlo y llevármelo a casa como sea", ha dicho.
La situación es un recordatorio de la importancia de la planificación y la acción en materia de mantenimiento de propiedades, especialmente aquellas que requieren especial cuidado y atención, como las embarcaciones náuticas.