En la Sala Clementina del Palacio Apostólico, el Papa León XIV recibió a las estrellas de cine y directores internacionales en el marco del Jubileo de la Esperanza del año 2025. El ambiente estaba cargado de expectación, ya que este encuentro es una rareza en estos tiempos. Entre los invitados se encontraron actrices como Cate Blanchett, actor Viggo Mortensen y director Albert Serra.
El Papa comenzó su intervención diciendo "la paz esté con vosotros", frase que suele pronunciar desde el momento en que fue elegido como Pontífice. Destacó la importancia del cine para "contemplar y comprender la vida" e interpretar la nostalgia de infinito. Según León XIV, "el cine representa un arte popular en su sentido más noble que 'nace para todos y habla a todos'".
El Papa también destacó el valor del cine para abrir "la mirada del alma", ya que el séptimo arte sabe asociar entretenimiento con la narración de la aventura espiritual del ser humano. A través de los medios de comunicación, había dado a conocer sus películas favoritas, como Qué bello es vivir (1946), La novicia rebelde (1965) y Gente corriente (1980).
Robert Prevost, director en plena era tecnológica, afirmó que "la lógica del algoritmo" tiende a repetir lo que ya funciona, pero el arte abre posibilidades a lo que es posible. El Papa hace un llamamiento a los artistas cinematográficos: "Defend la lentitud la lentitud cuando sea útil, el silencio cuando habla, la diferencia cuando provoca".
El encuentro fue muy inspirador según Cate Blanchett, quien aseguró que hacer cine significa entretener pero también incluir voces a menudo marginadas. Spike Lee le regaló al Pontífice una camiseta de baloncesto con la escrita "Pope Leo 14".
Monica Bellucci fue una de las primeras en abandonar el lugar por necesidades de agenda, pero antes dedicó un saludo a los periodistas. Escalera abajo, volvieron a coincidir y se esbozaron sonrisas cómplices. En un encuentro que no pasa todos los días dentro del Vaticano, la actriz italiana sorrió al diario EL MUNDO.
El Papa comenzó su intervención diciendo "la paz esté con vosotros", frase que suele pronunciar desde el momento en que fue elegido como Pontífice. Destacó la importancia del cine para "contemplar y comprender la vida" e interpretar la nostalgia de infinito. Según León XIV, "el cine representa un arte popular en su sentido más noble que 'nace para todos y habla a todos'".
El Papa también destacó el valor del cine para abrir "la mirada del alma", ya que el séptimo arte sabe asociar entretenimiento con la narración de la aventura espiritual del ser humano. A través de los medios de comunicación, había dado a conocer sus películas favoritas, como Qué bello es vivir (1946), La novicia rebelde (1965) y Gente corriente (1980).
Robert Prevost, director en plena era tecnológica, afirmó que "la lógica del algoritmo" tiende a repetir lo que ya funciona, pero el arte abre posibilidades a lo que es posible. El Papa hace un llamamiento a los artistas cinematográficos: "Defend la lentitud la lentitud cuando sea útil, el silencio cuando habla, la diferencia cuando provoca".
El encuentro fue muy inspirador según Cate Blanchett, quien aseguró que hacer cine significa entretener pero también incluir voces a menudo marginadas. Spike Lee le regaló al Pontífice una camiseta de baloncesto con la escrita "Pope Leo 14".
Monica Bellucci fue una de las primeras en abandonar el lugar por necesidades de agenda, pero antes dedicó un saludo a los periodistas. Escalera abajo, volvieron a coincidir y se esbozaron sonrisas cómplices. En un encuentro que no pasa todos los días dentro del Vaticano, la actriz italiana sorrió al diario EL MUNDO.