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El Ayuntamiento de Tarragona ha anunciado una reforma en la ordenanza de obras para agilizar los trámites de las licencias. La nueva normativa busca reducir el tiempo de respuesta de la administración y facilitar el proceso de concesión de permisos.
Las personas y empresas que deseen realizar reparaciones o obras tendrán que cumplir con un único documento, en lugar de los tres existentes, para comunicar los trabajos a realizar. Esto debería permitir una mayor agilidad en la tramitación de las solicitudes.
Una vez registrada la obra, podrá comenzarse sin demora y posteriormente se revisará para asegurarse que todo se ha realizado según la ley. El nuevo texto también prevé que se podrán agilizar hasta el 75% de las licencias que se tramitan en la Part Alta del Ayuntamiento.
Estos cambios son fruto de un acuerdo entre el PSC y Junts, presentado por el alcalde Rubén Viñuales y el portavoz Jordi Sendra. Según sendra, esta reforma es importante para recuperar autonomía urbanística en la ciudad, ya que los edificios que no sean Bien Cultural de Interés Nacional podrán ser tramitados por el ayuntamiento.
Además, se espera que con estos cambios, Tarragona pueda reducir aún más el tiempo de espera para recibir la autorización para hacer las obras, y el alcalde Viñuales ha expresado su confianza en que pronto la ciudad estará dentro del plazo máximo de dos meses para resolver las solicitudes de licencias.
Las personas y empresas que deseen realizar reparaciones o obras tendrán que cumplir con un único documento, en lugar de los tres existentes, para comunicar los trabajos a realizar. Esto debería permitir una mayor agilidad en la tramitación de las solicitudes.
Una vez registrada la obra, podrá comenzarse sin demora y posteriormente se revisará para asegurarse que todo se ha realizado según la ley. El nuevo texto también prevé que se podrán agilizar hasta el 75% de las licencias que se tramitan en la Part Alta del Ayuntamiento.
Estos cambios son fruto de un acuerdo entre el PSC y Junts, presentado por el alcalde Rubén Viñuales y el portavoz Jordi Sendra. Según sendra, esta reforma es importante para recuperar autonomía urbanística en la ciudad, ya que los edificios que no sean Bien Cultural de Interés Nacional podrán ser tramitados por el ayuntamiento.
Además, se espera que con estos cambios, Tarragona pueda reducir aún más el tiempo de espera para recibir la autorización para hacer las obras, y el alcalde Viñuales ha expresado su confianza en que pronto la ciudad estará dentro del plazo máximo de dos meses para resolver las solicitudes de licencias.