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Cataluña se ha convertido en una de las principales fuentes de marihuana en Europa gracias a la anómala combinación entre un negocio lucrativo y un crimen organizado que ha logrado instalarse en el territorio catalán. El director general de la Policía, Josep Lluís Trapero, alertó hoy sobre el riesgo de que se forme una "narcotráfica" o "narcoestado" si no se toman medidas urgentes.
La situación geográfica de Cataluña, situada en la frontera con Francia, y su proximidad a Europa, es un factor clave para la creciente cantidad de marihuana que se trae desde el norte de Europa. Además, la falta de regulación en este negocio, permite que los productores utilicen "reinversión", haciendo que la reincidencia en el delito sea una realidad.
El crimen organizado ha instalado su red en Cataluña gracias al atractivo que tiene este negocio. En los últimos años se ha observado cómo un producto ilícito se ha convertido en una "ventaja económica" para muchos ciudadanos, lo cual permite el aumento de sus ganancias. El director general de la Policía ha apuntado a uno de estos factores: 700 plantas pueden generar entre 250 y 300.000 euros en solo tres o cuatro cosechas.
Para Trapero, se trata de un problema social grave que debe ser abordado con una "penalidad muy baja" si queremos combatirlo efectivamente. En su opinión, la marihuana es un delito que debe estar considerado como un delito contra la salud pública, para que se endurezcan las penas a los narcotraficantes.
El director general de la Policía ha recordado cómo el tráfico de drogas puede llevar al crimen organizado. Para Trapero, la situación en Cataluña es grave porque Francia es el mayor consumidor de marihuana en Europa. La falta de una "tratada penal" justa para combatir el delito impide que se construya un "narcoestado", pero si no cambiamos esta actitud, podemos generar que la droga acabe impregnando las estructuras del Estado.
La situación geográfica de Cataluña, situada en la frontera con Francia, y su proximidad a Europa, es un factor clave para la creciente cantidad de marihuana que se trae desde el norte de Europa. Además, la falta de regulación en este negocio, permite que los productores utilicen "reinversión", haciendo que la reincidencia en el delito sea una realidad.
El crimen organizado ha instalado su red en Cataluña gracias al atractivo que tiene este negocio. En los últimos años se ha observado cómo un producto ilícito se ha convertido en una "ventaja económica" para muchos ciudadanos, lo cual permite el aumento de sus ganancias. El director general de la Policía ha apuntado a uno de estos factores: 700 plantas pueden generar entre 250 y 300.000 euros en solo tres o cuatro cosechas.
Para Trapero, se trata de un problema social grave que debe ser abordado con una "penalidad muy baja" si queremos combatirlo efectivamente. En su opinión, la marihuana es un delito que debe estar considerado como un delito contra la salud pública, para que se endurezcan las penas a los narcotraficantes.
El director general de la Policía ha recordado cómo el tráfico de drogas puede llevar al crimen organizado. Para Trapero, la situación en Cataluña es grave porque Francia es el mayor consumidor de marihuana en Europa. La falta de una "tratada penal" justa para combatir el delito impide que se construya un "narcoestado", pero si no cambiamos esta actitud, podemos generar que la droga acabe impregnando las estructuras del Estado.