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Rob Jetten, el joven líder de Demócratas 66 (D66) que dio un giro revolucionario en las elecciones legislativas holandesas.
Este político precoz de 27 años logró triunfar en una carrera política tan breve como intenso. Además del apodo "Robot Jetten", debido a su mirada severa y sus frases hechas, Rob Jetten se convirtió en el rostro de la joven centroderecha holandesa.
Su ascenso al poder fue posible gracias a un escenario político fragmentado, pero también debido a su capacidad para conectar con los jóvenes. Durante su juventud, Rob Jetten fue corredor de apoyo en entrenamientos de Sifan Hassan, la campeona olímpica de atletismo. Su experiencia en el deporte le ayudó a ganarse un lugar entre la gente joven.
La historia de Rob Jetten se vuelve aún más interesante cuando recuerda al incendio de una escuela primaria turca en su pueblo natal, Uden, por la noche del asesinato del cineasta Theo van Gogh. En ese momento, decidió que "el resto del mundo tachaba a mi pueblo de ser un foco de jóvenes de extrema derecha". Rob Jetten se unió a algunos compañeros para demostrar que todos eran iguales.
Desde su ascenso al poder, Rob Jetten ha adoptado una actitud más relajada y se deshizo de las gafas tras someterse a una operación de corrección de la vista. Ha mantenido una posición progresista, con énfasis en el crecimiento económico verde y la "movilidad inteligente" para las grandes ciudades y regiones en declive.
En sus promesas de campaña se encuentra el aumento de la inversión en educación y la rápida integración de los refugiados. Su europeísmo también es una de las características más destacadas, ya que ha subrayado que "quiere devolver a Países Bajos al corazón de Europa porque sin cooperación europea no estamos en ninguna parte".
Rob Jetten ha conquistado el corazón de muchos holandeses gracias a su personalidad carismática y sus propuestas innovadoras. Su boda con su pareja, el jugador argentino de hockey hierba Nicolás Keenan, está prevista para el próximo verano en España.
Este político precoz de 27 años logró triunfar en una carrera política tan breve como intenso. Además del apodo "Robot Jetten", debido a su mirada severa y sus frases hechas, Rob Jetten se convirtió en el rostro de la joven centroderecha holandesa.
Su ascenso al poder fue posible gracias a un escenario político fragmentado, pero también debido a su capacidad para conectar con los jóvenes. Durante su juventud, Rob Jetten fue corredor de apoyo en entrenamientos de Sifan Hassan, la campeona olímpica de atletismo. Su experiencia en el deporte le ayudó a ganarse un lugar entre la gente joven.
La historia de Rob Jetten se vuelve aún más interesante cuando recuerda al incendio de una escuela primaria turca en su pueblo natal, Uden, por la noche del asesinato del cineasta Theo van Gogh. En ese momento, decidió que "el resto del mundo tachaba a mi pueblo de ser un foco de jóvenes de extrema derecha". Rob Jetten se unió a algunos compañeros para demostrar que todos eran iguales.
Desde su ascenso al poder, Rob Jetten ha adoptado una actitud más relajada y se deshizo de las gafas tras someterse a una operación de corrección de la vista. Ha mantenido una posición progresista, con énfasis en el crecimiento económico verde y la "movilidad inteligente" para las grandes ciudades y regiones en declive.
En sus promesas de campaña se encuentra el aumento de la inversión en educación y la rápida integración de los refugiados. Su europeísmo también es una de las características más destacadas, ya que ha subrayado que "quiere devolver a Países Bajos al corazón de Europa porque sin cooperación europea no estamos en ninguna parte".
Rob Jetten ha conquistado el corazón de muchos holandeses gracias a su personalidad carismática y sus propuestas innovadoras. Su boda con su pareja, el jugador argentino de hockey hierba Nicolás Keenan, está prevista para el próximo verano en España.