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El Otoño Mágico en el Valle del Ambroz es una cita turística imprescindible para cualquier amante de la naturaleza y el paisaje. Este valle, situado en el norte de Cáceres, entre Salamanca y la Sierra de Gredos, se caracteriza por su variedad paisajística: montañas con más de dos mil metros de altura, bosques de castaños y robles, praderas y dehesas. Los ocho municipios que lo forman –Abadía, Aldeanueva del Camino, Baños de Montemayor, Casas del Monte, Gargantilla, Hervás, La Garganta y Segura de Toro– se presentan como un todo, con sus carácter y ritmo. Pero cada uno tiene también su particularidad.
El Otoño Mágico en el Valle del Ambroz es un acontecimiento que se celebra desde 1998. Durante más de un mes, los pueblos del valle organizan actividades para atraer visitantes: rutas de senderismo, carreras por montaña, talleres, conciertos, ferias de artesanía, encuentros micológicos, rutas en bicicleta, concursos de fotografía y jornadas gastronómicas. El evento tiene un lema cada año: este año es “bienestar natural”. Cada fin de semana se dedica a un tema diferente y a un municipio diferente.
En el Otoño Mágico del Valle del Ambroz, las rutas caminatas son una opción imperdible para explorar la naturaleza. La Ruta de los Castaños del Temblar es una de las más populares: solo cuatro kilómetros que llevan a cinco árboles monumentales. El Otoño Mágico también se celebra en otros pueblos del valle, como Hervás y Aldeanueva del Camino.
El valor del Valle del Ambroz es enorme para la economía local. Aunque parte de su territorio este verano sufrió los incendios, el paisaje sigue ofreciendo uno de los otoños más bonitos de Extremadura. Por eso es una cita turística que no debe perdirse: descubre la naturaleza, la vida tranquila y la hospitalidad de estos pueblos rurales.
El Otoño Mágico en el Valle del Ambroz es un acontecimiento que se celebra desde 1998. Durante más de un mes, los pueblos del valle organizan actividades para atraer visitantes: rutas de senderismo, carreras por montaña, talleres, conciertos, ferias de artesanía, encuentros micológicos, rutas en bicicleta, concursos de fotografía y jornadas gastronómicas. El evento tiene un lema cada año: este año es “bienestar natural”. Cada fin de semana se dedica a un tema diferente y a un municipio diferente.
En el Otoño Mágico del Valle del Ambroz, las rutas caminatas son una opción imperdible para explorar la naturaleza. La Ruta de los Castaños del Temblar es una de las más populares: solo cuatro kilómetros que llevan a cinco árboles monumentales. El Otoño Mágico también se celebra en otros pueblos del valle, como Hervás y Aldeanueva del Camino.
El valor del Valle del Ambroz es enorme para la economía local. Aunque parte de su territorio este verano sufrió los incendios, el paisaje sigue ofreciendo uno de los otoños más bonitos de Extremadura. Por eso es una cita turística que no debe perdirse: descubre la naturaleza, la vida tranquila y la hospitalidad de estos pueblos rurales.
En el Otoño Mágico del Valle del Ambroz me parece que todo se centra en las carreras por montaña, ¿qué pasa con los que no van a correr? 
Me gustaría ver más opciones de senderismo para personas que no están acostumbradas a correr 10 kilómetros. También creo que deberían tener más opciones gastronómicas, ya que si vas a pagar por un ticket de entrada es lógico que te ofrezcan algo de comida y bebida decente 
. Y además, ¿qué se ha hecho con el lema del "bienestar natural"? ¿Solo se centra en la naturaleza y no hay nada más?
Me parece que el Otoño Mágico del Valle del Ambroz es un evento que tiene todo para atraer a turistas: la naturaleza impresionante, las actividades variadas y la hospitalidad de los pueblos. Pero ¿qué me parece extraño? 
Que no haya más opciones de alojamiento para los visitantes. ¡Es como si se supusiera que todos vengan en coche con familiares o amigos! La gente tiene que gastar mucho dinero en transporte, y eso es un problema. Además, ¿por qué no hay más opciones de comida saludable? Solo fritos y galletas en las ferias de artesanía... ¡necesitan una variedad más grande!
. Pero lo que más me gusta es la idea de disfrutar de la vida tranquila y hospitalidad de esas pueblos rurales, es algo que se pierde en la ciudad. Me imagino que es un lugar donde puedes relajarte y conectarte con la naturaleza. Y aunque los incendios fueron un problema, el paisaje sigue siendo hermoso, estoy seguro de que vale la pena visitar el Valle del Ambroz.
Cada pueblo tiene su propia personalidad, pero también se siente muy conectado con la naturaleza. Me encanta cómo cada fin de semana hay un tema diferente y un municipio distinto. La Ruta de los Castaños del Temblar es una de las mejores, ¿no? 
Pero, aunque este verano hubo incendios, el paisaje sigue siendo impresionante. Me pregunto qué va a ser el próximo año, espero que siga siendo tan mágico como siempre 
. Pero a mí me parece un poco tonto que el evento se celebre desde 1998, en mi opinión eso es demasiado tiempo, deberían innovar un poco más y hacer algo nuevo cada año 
. Y no entiendo por qué no tienen alguna forma de reducir la huella turística, aunque es cierto que parte del territorio sufrió incendios este verano, aún así es importante cuidar el medio ambiente 
. En cualquier caso me parece un destino muy atractivo para explorar la naturaleza y disfrutar de la vida tranquila en pueblos rurales 
.
y si no vas a ir esta que va a ser el mes más mágico del año 