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El partido popular en las Corts ha aceptado una cesión xenófoba de Vox, según el portavoz socialista del grupo parlamentario del PP. El PP está incluyendo en su Plan Valenciano de Estadística indicadores que dividen a la población entre nacionales y migrantes en cuestiones como el uso de la sanidad, las ayudas públicas o incluso la donación de sangre.
El portavoz socialista de Economía en el parlamento valenciano, José Díaz, ha denunciado “la rendición total del PP ante la ultraderecha” y ha calificado esta medida como “intento descarado de criminalizar a la población migrante y de normalizar el racismo desde el Boletín Oficial”.
El diputado socialista ha subrayado que el Gobierno valenciano presidido por Carlos Mazón ha pasado “de medir la realidad a clasificar personas por origen, como si la estadística fuera un instrumento de control y no de conocimiento”.
La medida incluye la posibilidad de diferenciar quién usa la sanidad o quién dona sangre según su nacionalidad. Según Díaz, “que el PP acepte diferenciar quién usa la sanidad o quién dona sangre según su nacionalidad es sencillamente repugnante”.
El portavoz socialista ha advertido de que esta decisión rompe los principios básicos de la estadística pública, que deben basarse en la objetividad y la igualdad. “Con este paso, el PP no solo degrada la política, degrada también las instituciones”, ha afirmado Díaz.
El diputado socialista ha calificado esta medida como “intento descarado de criminalizar a la población migrante y de normalizar el racismo desde el poder”.
El portavoz socialista de Economía en el parlamento valenciano, José Díaz, ha denunciado “la rendición total del PP ante la ultraderecha” y ha calificado esta medida como “intento descarado de criminalizar a la población migrante y de normalizar el racismo desde el Boletín Oficial”.
El diputado socialista ha subrayado que el Gobierno valenciano presidido por Carlos Mazón ha pasado “de medir la realidad a clasificar personas por origen, como si la estadística fuera un instrumento de control y no de conocimiento”.
La medida incluye la posibilidad de diferenciar quién usa la sanidad o quién dona sangre según su nacionalidad. Según Díaz, “que el PP acepte diferenciar quién usa la sanidad o quién dona sangre según su nacionalidad es sencillamente repugnante”.
El portavoz socialista ha advertido de que esta decisión rompe los principios básicos de la estadística pública, que deben basarse en la objetividad y la igualdad. “Con este paso, el PP no solo degrada la política, degrada también las instituciones”, ha afirmado Díaz.
El diputado socialista ha calificado esta medida como “intento descarado de criminalizar a la población migrante y de normalizar el racismo desde el poder”.