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El presidente de la Generalitat valenciana, Carlos Mazón, enfrenta su aniversario del derrumbamiento del 29O, con el peso de las acusaciones creciendo cada día más. La jueza Nuria Tobarra ha acumulado pruebas que ponen en duda la versión oficial de Mazón sobre lo que pasó aquella tarde de octubre del 2024, cuando el Ejecutivo le advirtió a la población sobre las riadas.
Según el testimonio de Inmaculada Piles, jefa de servicio de la centralita telefónica de emergencias 112 de la Generalitat, un miembro de la Delegación de Gobierno en la Comunidad Valenciana pidió que se enviara el aviso ES Alert una hora antes de que se mandara el aviso a móviles. Esto contradice la versión de Mazón, quien ha admitido haberse acordado de enviar el aviso.
El testimonio de Piles destaca un desbordamiento del barranco del Poyo a las 18:35 del día del derrumbamiento, lo que sugiere que si el aviso se hubiera enviado en ese momento, se habrían podido salvar vidas. La jueza sostiene que la tardía notificación fue crucial para la gravedad de la situación.
La justicia ha obligado a Mazón a cambiar su versión varias veces sobre lo que sucedió aquella tarde. A pesar de esto, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, sigue insistiendo en que el presidente conteste a todas las preguntas sobre su papel en la tragedia.
La comparecencia de Maribel Vilaplana, la periodista con quien Mazón comió el día antes de la dana y a la que posteriormente acompañó hasta el aparcamiento, agrega más incertidumbre al caso. La jueza debe escuchar su testimonio, lo que obliga a Vilaplana a decir la verdad.
La presión sobre Mazón es cada vez mayor, tanto por parte de los investigadores como de la ciudadanía. El Partido Popular sigue fiando en la continuidad del presidente, pero el silencio de Feijóo sobre la situación ha generado preguntas.
El aniversario del 29O es un recordatorio de la gravedad de la tragedia y la responsabilidad de los líderes políticos. ¿Podrá Mazón recuperar su liderazgo y encontrar una forma de salir de este escándalo?
Según el testimonio de Inmaculada Piles, jefa de servicio de la centralita telefónica de emergencias 112 de la Generalitat, un miembro de la Delegación de Gobierno en la Comunidad Valenciana pidió que se enviara el aviso ES Alert una hora antes de que se mandara el aviso a móviles. Esto contradice la versión de Mazón, quien ha admitido haberse acordado de enviar el aviso.
El testimonio de Piles destaca un desbordamiento del barranco del Poyo a las 18:35 del día del derrumbamiento, lo que sugiere que si el aviso se hubiera enviado en ese momento, se habrían podido salvar vidas. La jueza sostiene que la tardía notificación fue crucial para la gravedad de la situación.
La justicia ha obligado a Mazón a cambiar su versión varias veces sobre lo que sucedió aquella tarde. A pesar de esto, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, sigue insistiendo en que el presidente conteste a todas las preguntas sobre su papel en la tragedia.
La comparecencia de Maribel Vilaplana, la periodista con quien Mazón comió el día antes de la dana y a la que posteriormente acompañó hasta el aparcamiento, agrega más incertidumbre al caso. La jueza debe escuchar su testimonio, lo que obliga a Vilaplana a decir la verdad.
La presión sobre Mazón es cada vez mayor, tanto por parte de los investigadores como de la ciudadanía. El Partido Popular sigue fiando en la continuidad del presidente, pero el silencio de Feijóo sobre la situación ha generado preguntas.
El aniversario del 29O es un recordatorio de la gravedad de la tragedia y la responsabilidad de los líderes políticos. ¿Podrá Mazón recuperar su liderazgo y encontrar una forma de salir de este escándalo?
. La presión es muy grande y cada día que pase sin que Mazón hable sobre lo que sucedió, va a ser difícil para él recuperar su liderazgo. Me parece que el caso está llegando a un punto crítico y la justicia tiene que tomar una decisión clara. 
. Espero que se resuelva pronto este caso de manera justa, así no va a haber más víctimas ni dolor para las familias.
Esto es muy complicado, el caso del 29O está cada vez más enredado. Me parece que Carlos Mazón está en un agujero sin salida 
, la presión es cada vez mayor y su versión sobre lo que pasó sigue cambiando. Inmaculada Piles tiene todo el derecho a hablar sobre lo que le contaron y ahora debe tener una cara, ya que si no dice la verdad, se va a poner más viento en las manos de los investigadores 
. La justicia quiere la verdad y no vamos a poder evitarlo...
, pero al final es la verdad lo que importa. La historia del 29O es un recordatorio que nos hace reflexionar sobre la responsabilidad que tenemos los líderes políticos con las vidas humanas. Si Mazón no ha sido honesto contigo mismo y con el pueblo valenciano, ¿cómo puede esperar recuperar su liderazgo? La justicia debe hacer su trabajo y Mazón debe ser juzgado por sus acciones 
¡Qué gato con sopa! 
Un presidente que no puede decir la verdad, un líder que no puede liderar. 
La justicia es dura, pero alguien tiene que hacerlo. 
es como si estuvieran tratando a Mazón como un criminal en lugar de un hombre que ha perdido a muchas personas. La verdad es que siempre he pensado que el poder y la influencia pueden corromper a las personas, pero nadie me habría dicho que lo harían así. La ciudadanía valenciana necesita saber la verdad sobre lo que pasó aquella tarde y necesitan que Mazón se tome la responsabilidad de sus acciones. ¡Es hora de que se escuchen las voces de aquellos que estuvieron allí!
Quizás el problema no es que el presidente esté envolvente en una trama, sino que está estando demasiado transparente. 
¡Es posible que sea la forma correcta de hacer las cosas! 
Y, al final, tal vez no importe quién salga bien parado o mal parado, lo importante es que aprendamos de este error y evitemos que se repita. 