PensamientoLatino
Well-known member
Isaías Lafuente, un hombre que ha dedicado su vida a la radio y la palabra, recibe el reconocimiento del Premio Ondas a toda su carrera. Pero para él, el premio es solo el final de una larga labor dedicada a contar historias y hacer justicia.
"Creo que soy un secundario de primera", dice Lafuente con ironía, refiriéndose a su papel en la radio. "Soy el mismo ante el micro, y fuera", destaca. Para él, lo que importa no es ser una estrella, sino hacer trabajar al equipo y contar las historias que tiene que contar.
La radio es un medio precario, según Lafuente. "La tecnología ha abierto posibilidades y ha multiplicado y facilitado la forma de trabajar", pero el medio sigue siendo "la misma que en 1924". Lo que sí veo es que, a la radio y a los medios de comunicación en general, se ha ido precarizando el trabajo.
"Se desperdicia talento", dice Lafuente. "Tú antes, cuando entrabas en la emisora y pasabas el precario que ha sido siempre el periodo de becario, sabías que si no la cagabas, se te dejaba trabajar y podías tener una carrera profesional". Ahora, ve llegan a becarios con la fecha de caducidad impresa en la frente, y eso es muy doloroso y debe de ser muy frustrante.
Lafuente también destaca la radicalización del mundo político. "En la radio, y en X, está desatado frente a la ultraderecha", dice. Pero para él, esto no significa que se haya ido radicalizando. "Yo, qué va", dice con ironía. "Ni te imaginas la autocontención que tengo todavía".
El periodista ha hablado sobre su vida y su carrera en varias ocasiones. Destaca que su nombre le fue puesto por su padre, Ángel Lafuente, empleado de banca. Su madre, Ángeles, se enteró por la radio de la travesura de su esposo y se dio cuenta de los natalicios y de los difuntos del día.
En resumen, Isaías Lafuente es un hombre que ha dedicado su vida a la radio y la palabra. Aunque ha recibido reconocimiento por su trabajo, para él, el premio es solo el final de una larga labor dedicada a contar historias y hacer justicia.
"Creo que soy un secundario de primera", dice Lafuente con ironía, refiriéndose a su papel en la radio. "Soy el mismo ante el micro, y fuera", destaca. Para él, lo que importa no es ser una estrella, sino hacer trabajar al equipo y contar las historias que tiene que contar.
La radio es un medio precario, según Lafuente. "La tecnología ha abierto posibilidades y ha multiplicado y facilitado la forma de trabajar", pero el medio sigue siendo "la misma que en 1924". Lo que sí veo es que, a la radio y a los medios de comunicación en general, se ha ido precarizando el trabajo.
"Se desperdicia talento", dice Lafuente. "Tú antes, cuando entrabas en la emisora y pasabas el precario que ha sido siempre el periodo de becario, sabías que si no la cagabas, se te dejaba trabajar y podías tener una carrera profesional". Ahora, ve llegan a becarios con la fecha de caducidad impresa en la frente, y eso es muy doloroso y debe de ser muy frustrante.
Lafuente también destaca la radicalización del mundo político. "En la radio, y en X, está desatado frente a la ultraderecha", dice. Pero para él, esto no significa que se haya ido radicalizando. "Yo, qué va", dice con ironía. "Ni te imaginas la autocontención que tengo todavía".
El periodista ha hablado sobre su vida y su carrera en varias ocasiones. Destaca que su nombre le fue puesto por su padre, Ángel Lafuente, empleado de banca. Su madre, Ángeles, se enteró por la radio de la travesura de su esposo y se dio cuenta de los natalicios y de los difuntos del día.
En resumen, Isaías Lafuente es un hombre que ha dedicado su vida a la radio y la palabra. Aunque ha recibido reconocimiento por su trabajo, para él, el premio es solo el final de una larga labor dedicada a contar historias y hacer justicia.