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Hay casos que se están rompiendo las barreras tradicionales, ¿no? Un hombre gay y una mujer heterosexual casados felices, y sin que el primer caso parezca ser un mero juego para la segunda. "Me casé con dos hombres gais", dijo Diane von Furstenberg en sus recientes memorias.
Pero, sobre todo, es la comunidad del poliamor. Etiquetas como queerplatónico, arromántico o de orientación mixta se están ganando terreno. Según Andrea Proenza Zoroquiaia, autora de "Cartografías del deseo amoroso", estas relaciones pueden satisfacer al principio por el reconocimiento social, pero a la larga generan frustración e infelicidad.
Algo que muchos hombres y mujeres no se dan cuenta es que están intentando colocar las piezas en el juego equivocado. La jerarquía de los afectos está siendo cuestionada, pero aún no hay una respuesta clara.
"Me gustaban los chicos", explicó Barry Diller en sus memorias. Pero, sobre todo, se refiere a su relación con Diane von Furstenberg. "Soy gay, y como persona gay, puedes mantener tu identidad como tal aunque tu relación no lo refleje".
Aunque hay muchos factores que contribuyen a estos cambios en las relaciones de pareja, algunos historiadores y psicólogos se preguntan si es posible encontrar una solución a la jerarquía de los afectos. Para ello, se pueden hacer acuerdos sexuales fuera del vínculo.
"El sexo no lo es todo", explicó Tricia Cooke. "Establece tres componentes: intimidad, pasión y compromiso. En su interacción, podrían explicar todos los tipos de relaciones afectivas humanas".
Aunque todavía hay mucho que aprender sobre estas nuevas formas de vincularse, parece que el futuro es diverso y lleno de posibilidades.
¿Te gustaría hacer un análisis más profundo de estos cambios?
Pero, sobre todo, es la comunidad del poliamor. Etiquetas como queerplatónico, arromántico o de orientación mixta se están ganando terreno. Según Andrea Proenza Zoroquiaia, autora de "Cartografías del deseo amoroso", estas relaciones pueden satisfacer al principio por el reconocimiento social, pero a la larga generan frustración e infelicidad.
Algo que muchos hombres y mujeres no se dan cuenta es que están intentando colocar las piezas en el juego equivocado. La jerarquía de los afectos está siendo cuestionada, pero aún no hay una respuesta clara.
"Me gustaban los chicos", explicó Barry Diller en sus memorias. Pero, sobre todo, se refiere a su relación con Diane von Furstenberg. "Soy gay, y como persona gay, puedes mantener tu identidad como tal aunque tu relación no lo refleje".
Aunque hay muchos factores que contribuyen a estos cambios en las relaciones de pareja, algunos historiadores y psicólogos se preguntan si es posible encontrar una solución a la jerarquía de los afectos. Para ello, se pueden hacer acuerdos sexuales fuera del vínculo.
"El sexo no lo es todo", explicó Tricia Cooke. "Establece tres componentes: intimidad, pasión y compromiso. En su interacción, podrían explicar todos los tipos de relaciones afectivas humanas".
Aunque todavía hay mucho que aprender sobre estas nuevas formas de vincularse, parece que el futuro es diverso y lleno de posibilidades.
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