TintaLatina
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La policía francesa continúa su búsqueda por el robo más codiciado en la historia del Louvre, pero las joyas siguen desaparecidas. En una nueva maniobra policial, cinco sospechosos, incluyendo a uno de los presuntos ladrones, han sido detenidos en París y la periferia de la ciudad.
Entre ellos se encuentra el hombre que evaluado en 20 millones de euros, uno de los presuntos ladrones del botín de ocho joyas de Napoleón y la Emperatriz, que sigue sin poder recuperarse. Sin embargo, la fiscalía no ha dado cabida a las esperanzas de recuperar el botín.
Los cinco sospechosos detenidos son parte de una doble operación en el distrito 16 de París y en la periferia de la capital. Otros dos hombres que habían sido detenidos el sábado pasado, reconocieron parcialmente su participación en el robo durante una comparecencia judicial.
La fiscal de París, Laure Beccuau, aseguró que no se descartaba la implicación de más sospechosos y que uno de los cinco detenidos pudo haber participado directamente en el robo. Los otros cuatro están considerados como personas de interés que pueden tener información sobre el incidente.
"Quiero mantener la esperanza de que las joyas sean encontradas y puedan ser devueltas al Museo del Louvre", declaró la fiscal en una conferencia de prensa. "Las joyas robada son invendibles hoy en día. Todavía hay tiempo para devolverlas".
Entre las joyas robadas se encuentran el collar del adorno de zafiro de la reina Marie-Amélie y una tiera de la emperatriz Eugenia. El robo fue perpetrado el 19 de octubre, usando una plataforma elevadora instalada en una camioneta para alcanzar las ventanas en la fachada al río Sena del museo del Louvre.
La operación duró solo siete minutos y los asaltantes huyeron con el botín a bordo de "scooters" Yamaha TMAX. Sin embargo, la fiscalía reconoce que la falta de cámaras de videovigilancia cubriendo el perímetro del museo fue un factor importante en la comisión del robo.
La única cámara que había en la fachada usada por los asaltantes apuntaba hacia el oeste y no podía grabar el asalto. Las alarmas interiores saltaron solo cuando los ladrones estaban ya dentro del museo, recién abierto a primera hora de la mañana para los visitantes.
La investigación sigue en curso y se espera que se avance en la búsqueda por las joyas robadas.
Entre ellos se encuentra el hombre que evaluado en 20 millones de euros, uno de los presuntos ladrones del botín de ocho joyas de Napoleón y la Emperatriz, que sigue sin poder recuperarse. Sin embargo, la fiscalía no ha dado cabida a las esperanzas de recuperar el botín.
Los cinco sospechosos detenidos son parte de una doble operación en el distrito 16 de París y en la periferia de la capital. Otros dos hombres que habían sido detenidos el sábado pasado, reconocieron parcialmente su participación en el robo durante una comparecencia judicial.
La fiscal de París, Laure Beccuau, aseguró que no se descartaba la implicación de más sospechosos y que uno de los cinco detenidos pudo haber participado directamente en el robo. Los otros cuatro están considerados como personas de interés que pueden tener información sobre el incidente.
"Quiero mantener la esperanza de que las joyas sean encontradas y puedan ser devueltas al Museo del Louvre", declaró la fiscal en una conferencia de prensa. "Las joyas robada son invendibles hoy en día. Todavía hay tiempo para devolverlas".
Entre las joyas robadas se encuentran el collar del adorno de zafiro de la reina Marie-Amélie y una tiera de la emperatriz Eugenia. El robo fue perpetrado el 19 de octubre, usando una plataforma elevadora instalada en una camioneta para alcanzar las ventanas en la fachada al río Sena del museo del Louvre.
La operación duró solo siete minutos y los asaltantes huyeron con el botín a bordo de "scooters" Yamaha TMAX. Sin embargo, la fiscalía reconoce que la falta de cámaras de videovigilancia cubriendo el perímetro del museo fue un factor importante en la comisión del robo.
La única cámara que había en la fachada usada por los asaltantes apuntaba hacia el oeste y no podía grabar el asalto. Las alarmas interiores saltaron solo cuando los ladrones estaban ya dentro del museo, recién abierto a primera hora de la mañana para los visitantes.
La investigación sigue en curso y se espera que se avance en la búsqueda por las joyas robadas.