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Una operación policial sin precedentes en Río de Janeiro, donde al menos 64 muertos y decenas de detenidos resultaron del enfrentamiento entre el gobierno y el crimen organizado. La megaoperación contra el Comando Vermelho ha sido la más letal de la historia de la ciudad brasileña.
Seis mil cuatrocientos policias, apoyados por dos vehículos blindados, un helicóptero, drones policiales y una docena de vehículos de demolición, participaron en la operación. El objetivo principal era capturar a Edgar Alves de Andrade, conocido como "Doca", el jefe del Comando Vermelho en una barriada carioca llamada Complexo da Penha.
El Comando Vermelho es un grupo criminal que se dedica al tráfico de drogas y armas. Según fuentes policiales, este grupo ha sido responsable por la muerte de miles de personas en Río de Janeiro. La operación policial pretendía frenar la expansión territorial del grupo y desmantelar su red de narcotráfico.
El gobernador de Río de Janeiro, Claudio Castro, se quejó de que las Fuerzas Armadas rechazaron tres veces sus peticiones para enviar blindados de apoyo. Ha pedido ayuda a los militares con el argumento de que esta "es una guerra que nada tiene que ver con la seguridad urbana" sino que está alimentada por las armas del narcotráfico internacional.
La policía ha incautado más de 75 fusiles y detenido a decenas de personas, incluyendo soldados de pie que controlaban barriadas completas donde dictaban la ley. El principal objetivo de la operación policial era atrapar a los jefes del negocio, a los contables que les ayudan a blanquear sus ganancias y a los soldados de pie que con ellos mantienen el control absoluto sobre barriadas completas.
La operación se centró en dos enormes conjuntos de favelas donde viven casi 300.000 personas, el Complexo da Penha y el Complexo do Alemão. El primero es un centro neurálgico de las actividades del Comando Vermelho. La policía ha movilizado un despliegue enorme para atrapar a los jefes del negocio.
El epicentro de la megaoperación son dos enormes conjuntos de favelas donde viven casi 300.000 personas, el Complexo da Penha y el Complexo do Alemão. El primero es un centro neurálgico de las actividades del Comando Vermelho. El gobierno ha movilizado a más de 2.500 agentes de la policía militar y civil para frenar la expansión territorial del grupo.
La operación policial ha sido respuesta a la creciente incorporación de cámaras en los uniformes, que ha contribuido a reducir las muertes en enfrentamientos a tiros con criminales. La policía brasileña es considerada una de las que más mata y más muere del mundo. En torno a un 10% de las muertes violentas suelen ser obra de uniformados.
Seis mil cuatrocientos policias, apoyados por dos vehículos blindados, un helicóptero, drones policiales y una docena de vehículos de demolición, participaron en la operación. El objetivo principal era capturar a Edgar Alves de Andrade, conocido como "Doca", el jefe del Comando Vermelho en una barriada carioca llamada Complexo da Penha.
El Comando Vermelho es un grupo criminal que se dedica al tráfico de drogas y armas. Según fuentes policiales, este grupo ha sido responsable por la muerte de miles de personas en Río de Janeiro. La operación policial pretendía frenar la expansión territorial del grupo y desmantelar su red de narcotráfico.
El gobernador de Río de Janeiro, Claudio Castro, se quejó de que las Fuerzas Armadas rechazaron tres veces sus peticiones para enviar blindados de apoyo. Ha pedido ayuda a los militares con el argumento de que esta "es una guerra que nada tiene que ver con la seguridad urbana" sino que está alimentada por las armas del narcotráfico internacional.
La policía ha incautado más de 75 fusiles y detenido a decenas de personas, incluyendo soldados de pie que controlaban barriadas completas donde dictaban la ley. El principal objetivo de la operación policial era atrapar a los jefes del negocio, a los contables que les ayudan a blanquear sus ganancias y a los soldados de pie que con ellos mantienen el control absoluto sobre barriadas completas.
La operación se centró en dos enormes conjuntos de favelas donde viven casi 300.000 personas, el Complexo da Penha y el Complexo do Alemão. El primero es un centro neurálgico de las actividades del Comando Vermelho. La policía ha movilizado un despliegue enorme para atrapar a los jefes del negocio.
El epicentro de la megaoperación son dos enormes conjuntos de favelas donde viven casi 300.000 personas, el Complexo da Penha y el Complexo do Alemão. El primero es un centro neurálgico de las actividades del Comando Vermelho. El gobierno ha movilizado a más de 2.500 agentes de la policía militar y civil para frenar la expansión territorial del grupo.
La operación policial ha sido respuesta a la creciente incorporación de cámaras en los uniformes, que ha contribuido a reducir las muertes en enfrentamientos a tiros con criminales. La policía brasileña es considerada una de las que más mata y más muere del mundo. En torno a un 10% de las muertes violentas suelen ser obra de uniformados.