CharlaLatam
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La reunión cancelada en Budapest entre Donald Trump y Vladímir Putin parece haberse pospuesto, sin embargo, las razones detrás de esta decisión siguen siendo un misterio. El motivo es que el presidente estadounidense ha decidido no negociar con su homólogo ruso, a pesar de la tensa situación entre ambos países.
Trump ha mostrado una postura firme y despectiva hacia las reuniones diplomáticas, afirmando que "no quiere perder tiempo". Esta actitud es un cambio significativo en comparación con los tiempos en que se preparaban cumbres entre las dos superpotencias nucleares. En ese momento, la tensión era enorme y todo se preparaba con meticulosidad.
Sin embargo, según fuentes periodísticas y expertos, hay una realidad detrás de esta decisión del presidente estadounidense. Trump ha establecido una línea roja para Putin y asume los principios de la UE y Ucrania en lo que respecta a no producirse ningún intercambio o cesión de territorio, ya que eso supondría "recompensar" de alguna forma la invasión rusa.
La demarcación que separará en el futuro a Ucrania libre bajo control del gobierno de Kiev y la ocupada por las tropas rusas debe trazarse siguiendo la línea de frente actual, es decir, declarando un alto el fuego. Sin embargo, parece que se ha pospuesto la reunión para evitar complicaciones.
Se afirma que dos altos funcionarios estadounidenses filtraron a la agencia Reuters un comunicado privado enviado desde Rusia en el que se estipula la exigencia de ceder la totalidad del Donbás. Sin embargo, según expertos, esta demanda es imposible de satisfacer para la parte ucraniana.
El tema de la cesión del Donbás es extremadamente complejo y tiene implicaciones importantes para la seguridad de Ucrania y el planeta en general. La pequeña porción del Donbás que aún controla Ucrania reviste una gran importancia estratégica, incluyendo el denominado 'corredor fortaleza', una línea de 50 kilómetros que incluye cuatro ciudades con cientos de miles de habitantes.
A pesar de las presiones de Trump para que Putin se retirara de territorios ansiados por Kiev como Zaporiyia y Jersón, pese a los gritos y los malos modos que presidieron la reunión, Zelenski cantó finalmente victoria: su interlocutor no logró doblegarle el brazo. "Después de dos horas de discusión, su mensaje fue positivo: estamos donde estamos en la línea de frente", declaró el mandatario ucraniano.
Este aplazamiento no significa que las negociaciones hayan muerto, se hayan roto o que no exista un armisticio a medio plazo. "Ni Trump ni Putin presentaron fechas concretas; ¡no podemos posponer lo que no ha sido convocado!", espetó el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov. "Nos aguardan días graves", adelantó Peter Szijjarto, ministro de Exteriores de Hungría.
En resumen, la situación sigue siendo incierta y las razones detrás del aplazamiento de la reunión en Budapest siguen siendo un misterio.
Trump ha mostrado una postura firme y despectiva hacia las reuniones diplomáticas, afirmando que "no quiere perder tiempo". Esta actitud es un cambio significativo en comparación con los tiempos en que se preparaban cumbres entre las dos superpotencias nucleares. En ese momento, la tensión era enorme y todo se preparaba con meticulosidad.
Sin embargo, según fuentes periodísticas y expertos, hay una realidad detrás de esta decisión del presidente estadounidense. Trump ha establecido una línea roja para Putin y asume los principios de la UE y Ucrania en lo que respecta a no producirse ningún intercambio o cesión de territorio, ya que eso supondría "recompensar" de alguna forma la invasión rusa.
La demarcación que separará en el futuro a Ucrania libre bajo control del gobierno de Kiev y la ocupada por las tropas rusas debe trazarse siguiendo la línea de frente actual, es decir, declarando un alto el fuego. Sin embargo, parece que se ha pospuesto la reunión para evitar complicaciones.
Se afirma que dos altos funcionarios estadounidenses filtraron a la agencia Reuters un comunicado privado enviado desde Rusia en el que se estipula la exigencia de ceder la totalidad del Donbás. Sin embargo, según expertos, esta demanda es imposible de satisfacer para la parte ucraniana.
El tema de la cesión del Donbás es extremadamente complejo y tiene implicaciones importantes para la seguridad de Ucrania y el planeta en general. La pequeña porción del Donbás que aún controla Ucrania reviste una gran importancia estratégica, incluyendo el denominado 'corredor fortaleza', una línea de 50 kilómetros que incluye cuatro ciudades con cientos de miles de habitantes.
A pesar de las presiones de Trump para que Putin se retirara de territorios ansiados por Kiev como Zaporiyia y Jersón, pese a los gritos y los malos modos que presidieron la reunión, Zelenski cantó finalmente victoria: su interlocutor no logró doblegarle el brazo. "Después de dos horas de discusión, su mensaje fue positivo: estamos donde estamos en la línea de frente", declaró el mandatario ucraniano.
Este aplazamiento no significa que las negociaciones hayan muerto, se hayan roto o que no exista un armisticio a medio plazo. "Ni Trump ni Putin presentaron fechas concretas; ¡no podemos posponer lo que no ha sido convocado!", espetó el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov. "Nos aguardan días graves", adelantó Peter Szijjarto, ministro de Exteriores de Hungría.
En resumen, la situación sigue siendo incierta y las razones detrás del aplazamiento de la reunión en Budapest siguen siendo un misterio.